EL VIAJE DE PAU
Benjamín Recacha
Autoedición, 2013
Pau quiere dejar la gran ciudad para empezar de cero en un pueblo de montaña. Una noche conoce a Sandra y a Diego, un viejo pastor del Pirineo Aragonés que quiere volver a su tierra. El padre de Diego desapareció durante la Guerra Civil sin dejar rastro. La casualidad o el destino, les conduce hasta su diario, y a partir d
Desde que una tarde conocí a Benjamín Recacha estaba deseando leer El viaje de Pau pero, por unas cosas o por otras, no había encontrado el momento de disfrutar de su lectura. Y sí, digo disfrutar porque eso es lo que harás si lees su libro. Narrado a modo de diario con una prosa ágil, pero no frenética, es decir, que te lleva a través de la historia con un ritmo adecuado.
Se trata de una historia de personas, más que de meros personajes, en la que el paisaje de montaña y la naturaleza en sí cobra un protagonismo tal que termina formando parte de la vida de Pau. Pero ante todo y sobre todo, es una historia alrededor de la memoria histórica, de los hombres y mujeres que desaparecieron o sufrieron las consecuencias de la Guerra Civil y de las personas que, como Diego y Lali, han luchado y luchan porque se les devuelva la dignidad de poder recuperar los restos de ese ser querido que «desapareció» y del que nunca volvieron a saber nada.
Si importante es el tema de la memoria histórica en la trama de El viaje de Pau, también lo son, si cabe más, las segundas oportunidades. Son esos hechos casuales que ponen en marcha una serie de acontecimientos que hacen que la vida dé un giro de 180 grados, como le ocurre a Pau al encontrar a Diego; como le ocurre al propio Diego o a la pequeña Ariadna la tarde que se paró a jugar con Greñudo, el perro de Diego.
En un principio me parecía que El viaje de Pau se movería alrededor del cambio de vida que, desde hace tiempo, intenta llevar a cabo Pau sin conseguirlo, sin ser capaz de romper con todo aquello que le hace infeliz y poder conseguir una vida más satisfactoria. A medida que fui leyendo me di cuenta que, como decía Kavafis en su Viaje a Ítaca, lo importante no es el objetivo final, lo importante es el viaje en sí, es la vida…
Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias…
Y eso es lo que ha conseguido Benjamín Recacha, quitarle importancia al destino para que el viaje cobre todo su protagonismo, un viaje lleno de aventuras, de experiencias, de sentimientos y de emociones.
Por mi parte no tengo más que añadir. Sólo os recomiendo muy mucho que no os perdáis su lectura, no os arrepentiréis de haber iniciado el viaje. Y si queréis saber más cosas de este autor, leer más escritos suyos o simplemente comentarle alguna cosa, os dejo el enlace de su blog. En él también encontraréis la forma de como conseguir el libro, tanto en papel como en digital http://benjaminrecacha.com/
¡Feliz lectura, amigos!
27 de marzo de 2015 en 00:16
¡Guau! (No soy Greñudo) Qué reseña tan bonita. Muchas gracias, Chelo. Me ha encantado, y celebro que hayas disfrutado la lectura. «Lo importante no es el objetivo final, lo importante es el viaje en sí, es la vida…» Esa es exactamente la esencia con la que pretendía impregnar la novela, me alegro de haber conseguido transmitirla.
Un fuerte abrazo.
27 de marzo de 2015 en 19:52
Y yo me alegro de haber captado la esencia del libro.
Besos y abrazos de los de seguir adelante.
27 de marzo de 2015 en 00:38
Reblogueó esto en la recachay comentado:
Cuando estoy a punto de publicar mi segunda novela, me encanta encontrarme con sorpresas tan agradables como esta deliciosa reseña de El viaje de Pau en ‘La librería de Chelo’. Muchas gracias, amiga, por esas palabras tan bonitas que le dedicas a Pau y compañía.
27 de marzo de 2015 en 19:53
Si una historia me gusta, escribo un comentario. Si no me gusta, simplemente no digo nada y esta ya ves que me ha gustado 🙂
27 de marzo de 2015 en 00:51
Fantástica reseña de este buen libro, la historia que cuenta, mejor dicho las historias que cuentan nos van llevando de la mano hacia esas vidas, esas experiencias, vivencias e historia de unos hechos.
Un gran abrazo Chelo
27 de marzo de 2015 en 19:57
Ya me contaste que tú también habías disfrutado con su lectura.
Un abrazo, Cris.
27 de marzo de 2015 en 10:48
Preciosa reseña, Chelo!
Sin duda un libro para leer, disfrutar y reflexionar con su lectura.
Un abrazo, amiga mía.
27 de marzo de 2015 en 19:58
Así es, querida amiga. Creo que tú también disfrutarás de su lectura.
Besos con abrazo.
27 de marzo de 2015 en 13:17
Aun no he podido leer el libro, creo que no tardará en publicar otro y entonces quizás los leeré los dos!
27 de marzo de 2015 en 19:59
Es interesante pensar que ya tenemos otro escritor al que seguir.
Un abrazo, Rosa.
28 de marzo de 2015 en 11:35
Estoy deseando zambullirme ! Muy bonita reseña, querida Chelo.
Un besazo!
28 de marzo de 2015 en 11:43
Es una buena historia, Bárbara.
Besos de fin de semana soleado.
28 de marzo de 2015 en 11:47
Besos y a disfrutar del buen tiempo!
19 de octubre de 2020 en 14:30
Que recuerdos me ha traído este post, como pasa el tiempo, que entrañable novela, la verdad disfruté mucho leyendo estas aventuras. Lo volveré a leer. Un abrazo guapa 😗
19 de octubre de 2020 en 15:12
Siempre es un buen momento para releer.
Besos con abrazo, Carmen.