La librería de Chelo

Este es el blog de Chelo Puente, donde descubrirás algo sobre mí a través de las palabras escritas y leídas.


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Cuatro a cenar


Portada del libro

Portada del libro

CUATRO A CENAR

Josep Aguilella

Autoedición

Nada le podía hacer pensar a Berta que se encontraría por sorpresa con sus amigas Noa y Leire en aquel fantástico hotel de Andorra, desde el que se divisaba todo el valle. Ella esperaba pasar aquel tranquilo fin de semana de septiembre junto a Víctor, poniéndose al día de los acontecimientos que se habían ido sucediendo en sus respectivas vidas durante el tiempo que habían estado sin verse. Pensó que disfrutarían de una cena romántica en el restaurante del hotel, frente a la chimenea. Pero nunca se podía imaginar que en aquella mesa serían más de dos a cenar. Tampoco imaginó que ese fin de semana marcaría un antes y un después en sus vidas.

Cuatro a cenar, una novela que habla de la amistad desinteresada y profunda, del amor al margen de los estereotipos y del cariño a los hijos, de generosidad, de buscar la forma de encontrarse a sí mismo y sobre todo y por encima de todo es una historia de segundas oportunidades, esas que, a veces, te regala la vida y que es fundamental aprovechar porque no sabes nunca si habrá otra.

Seis personajes (cuatro mujeres y dos hombres) que van creciendo en intensidad a medida que transcurre la narración. Dice el autor que podrían ser cualquiera de nosotros, una amiga, un vecino… porque lo cierto es que ha conseguido que el lector pueda identificarse con ellos. Ha conseguido que los queramos y que les deseemos todo lo mejor.

Esta novela, de algo más de 180 páginas, se lee con facilidad, placer y con expectación por saber cómo terminará esa historia que, como curiosidad, os cuento que tiene múltiples narradores que, en ocasiones, coinciden con los propios personajes, algo que no es muy habitual. Avanzamos la narración mientras pensamos cómo terminará aquella historia, hasta llegar a un final bien resuelto por Josep Aguilella.

En fin, dicho lo dicho, os recomiendo su lectura, no porque el autor sea amigo nuestro, sino porque leerlo merece la pena. Estoy segura de que no os defraudará y disfrutaréis leyéndolo.

Si queréis comprar el libro lo podéis adquirir a través de Amazon, tanto en digital como en papel y si lo queréis dedicado por el autor, me lo podéis pedir a mí que os lo enviaré encantada, con la dedicatoria.

¡Felices lecturas, amig@s!


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Suite francesa


Portada del libro

Portada del libro

SUITE FRANCESA

Irène Némirovski

Traducción de José Antonio Soriano Marco

Edit. Salamandra

Imbuida de un claro componente autobiográfico, Suite francesa se inicia en París los días previos a la invasión alemana, en un clima de incertidumbre e incredulidad. Enseguida, tras las primeras bombas, miles de familias se lanzan a las carreteras en coche, en bicicleta o a pie. Némirovsky dibuja con precisión las escenas, unas conmovedoras y otras grotescas, que se suceden en el camino: ricos burgueses angustiados, amantes abandonadas, ancianos olvidados en el viaje, los bombardeos sobre la población indefensa, las artimañas para conseguir agua, comida y gasolina. A medida que los alemanes van tomando posesión del país, se vislumbra un desmoronamiento del orden social imperante y el nacimiento de una nueva época.

Según se sabe por sus notas, Suite francesa fue pensada como una composición en cinco partes, como cinco son los tiempos de una suite musical, que fue la idea de la autora, de ahí su título. Sin embargo sólo pudo escribir dos de las cinco, que son las que podemos leer. En ellas nos describe un retrato intimista de la burguesía ilustrada francesa durante la ocupación alemana, donde su presencia despertará odios, pero también historias de amores ocultos y colaboracionismo.

Irène Némirovsky - 1903-1942

Irène Némirovsky – 1903-1942

Como decía anteriormente, la historia tiene dos partes: Tempestad en junio, donde describe la huida de las familias parisinas de los bombardeos de París. Se retratan familias y personajes de todo tipo que, ante la desesperación del momento, se roban unos a los otros el agua, la comida o la gasolina sin importar su condición social. En Dolce, la estructura es de una novela y la trama se sitúa en un pueblo llamado Bussy, que es ocupado por los alemanes durante tres meses, tiempo en el que conviven con las gentes del lugar y entre los que se suscitan sentimientos contrapuestos: desconfianza y aceptación, odio y amor, resignación e incluso simpatía. 

Hace tiempo que quería leer Suite francesa, pero me resistía a hacerlo por el temor a que me encontrara con una narración de un tiempo de guerra vivido personalmente por la autora, y que este hecho -era mi temor- no le hubiera permitido distanciarse del drama que ella misma estaba viviendo, pero me alegra decir que mis temores eran infundados porque ha dotado a la narración de una extraordinaria lucidez, pero también de un desasosiego exento de sentimentalismos, para mostrarnos el reflejo fiel de una sociedad sin rumbo. Su realismo es una radiografía fiel de un país que la ha abandonado a su suerte, como a ella misma abandonó. Irène Némirovxky no llegó a vivir el momento del final de la guerra, pero fue capaz de abstraerse y plasmar un testimonio profundo y conmovedor del ser humano.

La edición de la editorial Salamandra incluye también un gran número de notas de la autora, donde se nos revela como una escritora metódica, que no dejaba sitio a la improvisación. A pesar de la escasez de papel y del peligro que corría su vida, nos ha dejado un auténtico manual de cómo nace una obra literaria. En esas notas descubrimos su afán de escribir una historia que perdurara en el tiempo y así, podemos encontrar una fechada el 2 de junio de 1942, en la que decía: “no olvidar nunca que la guerra acabará y que toda la parte histórica palidecerá. Tratar de introducir el máximo de cosas, de debates que puedan interesar a la gente en 1952 o en 2052…” y lo ha conseguido de forma magistral, porque han pasado más de setenta años, pero siguen existiendo el amor, las guerras, los sentimientos, la envidia, la desconfianza…

Hace poco os dejé un comentario de la película, que no está mal, pero que en ningún caso ha captado la grandeza de esta obra literaria. Ahora que he leído esta maravilla inconclusa sólo puedo pensar cómo habría sido leer la suite completa. Sí lo sé, hubiera sido sublime.

¡Felices lecturas, amig@s!


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El vino de la soledad


Portada del libro

Portada del libro

EL VINO DE LA SOLEDAD

Irène Némirovsky

Edit. Salamandra

 

El vino de la soledad narra la historia de la pequeña Elena de los ocho años a la mayoría de edad, desde Ucrania hasta San Petersburgo, Finlandia y finalmente París, donde la familia se instala tras el estallido de la revolución rusa, en un recorrido paralelo al que realiza la propia Irène Némirovsky. La madre de Elena, una mujer bella y frívola de origen noble, desprecia a su marido, un potentado judío, y a su hija. Tras la muerte de la institutriz francesa de Elena, la vida de la niña se vuelve aún más difícil, pues su madre instala en la casa a su amante, un primo quince años más joven que ella. No obstante, el tiempo convierte a Elena en una joven hermosa, y el día que descubre que atrae al amante de su madre, comprende que ha llegado el momento de vengarse. 

Creo que ya os he contado que mi primer encuentro con la magnífica Iréne Némirovsky fue con su novela corta El baile y desde entonces sigo fascinada por su forma de escribir. Precisamente es junto con El baile, esta novela de El vino de la soledad las dos más autobiográficas de la autora, porque también ella tuvo una madre frívola y desequilibrada y un padre ausente.

Iène Némirovsky

Irène Némirovsky

Son impactantes sus descripciones sobre las ciudades en las que vive Elena. La forma de transmitirnos el frío, la oscuridad, la ausencia de sol de estas ciudades, es impecable y nos llega hasta muy dentro, hasta el punto de hacernos sentir ese frío glacial, como una metáfora del frío glacial de la relación de Elena con su madre.

También de forma magistral asistimos a la evolución psicológica de Elena, además de a su evolución física que la convierte en una joven bella, pero con un sentimiento implacable de venganza en su vida de soledad. Y pienso que es la soledad, junto a una crítica feroz hacia esa sociedad frívola y banal, los dos temas fundamentales de la novela.

Con un final, no sé si inesperado, pero sí impactante, nos parece entregar un rayo de esperanza, cuando Elena desaparece bajo el Arco del Triunfo de París, quizá -de forma simbólica- con el firme propósito de una nueva vida totalmente diferente a la que ha vivido hasta entonces.

Igual que las novelas anteriores que he leído de ella, es fascinante y seguiré leyéndola y dejándome seducir por sus palabras.

¡¡Felices lecturas, amigos!!

abril, 2014 © chelopuente


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Una tienda en París


 

Portada del libro

Portada del libro

UNA TIENDA EN PARÍS

Màxim Huerta

Edit. Martínez Roca

 

«¿Alguna vez has pensado empezar de cero en otra ciudad? Fue entonces cuando todo cambió. Justo al acercarme a aquel viejo cartel de madera escrito en francés que vendían en un anticuario improvisado de Madrid. Aux tissus des Vosges, Alice HUMBERT, nouveautés. Entré sin decir nada. Tenía la mirada perdida del que logra lo que quiere. En pocos segundos presentí un vuelco y una irreprimible necesidad de cambiar de vida. Traducido quería decir: Tejidos de los Vosgos, Alice Humbert, novedades. Significaba más, mucho más…» de esta forma es como la protagonista descubre que necesita un cambio imprescindible en su vida.

Esta tercera novela de Màxim Huerta narra la historia de Teresa, que vive en Madrid. A pesar de su vida de economía desahogada le falta algo y por ello se dedica a asistir a clases de dibujo, donde le cuenta al anciano profesor que quiere dibujar en color para que su vida deje de ser gris.

Siempre ha estado supeditada a la supervisión de su estricta tía -desde que quedó huérfana siendo niña- y aun cuando ya tiene casi cuarenta años, sigue obedeciéndola, incapaz de vivir su vida como a ella le hubiera gustado vivirla, lo que le provoca una angustia constante.

Màxim Huerta

Màxim Huerta

El día que encuentra -en un anticuario de Madrid- el cartel de una antigua tienda de telas en París, se da cuenta que ha llegado el momento de cambiar, de iniciar ese viaje que le permita ser quien quiere ser y éso lo va a descubrir poco a poco en París, donde decide comprar el local en el que estuvo la tienda de telas del cartel.

Un recorrido por preciosos rincones del París actual, pero también del París de los años 20. Una mujer en busca de su identidad que comienza su viaje iniciático con destino París, su propia Ítaca. Una mezcla de los sentimientos de Teresa, una mujer del siglo XXI y los de Alice Humbert, una mujer de los años 20. Un padre y un hijo distantes, pero al mismo tiempo llenos de cariño el uno por el otro. Unas fotografías que cuentan la vida de Alice y paseos, muchos paseos bajo la fina lluvia de París… Eso es lo que me ha parecido Una tienda en París, además de sorprenderme gratamente la exposición de sentimientos tan femeninos como el miedo a defraudar, a desobedecer, a vivir como quieres vivir… que creo que Màxim Huerta ha tratado muy bien en los dos personajes femeninos, Teresa y Alice.

Después de leerla querrás volver a París y pasear por esas calles, sentarte en aquel café y buscar la tienda de Teresa, que antes lo fue de la joven Alice.

¡¡Feliz lectura, amigos!!

abril, 2014 © chelopuente

 


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Nació un genio


picassoEl 25 de octubre de 1881 nacía en la ciudad de Málaga un niño que llegaría a ser el genio de la pintura

Pablo Ruiz Picasso

pintor excepcional  del siglo XX, que junto a George Braque y Juan Gris, lideraron el movimiento artístico del Cubismo.

Al vivir más de noventa años, su obra es extensísima. Más de 2.000 obras repartidas por todos los mejores museos del mundo, además de participar desde los inicios en diferentes movimientos artísticos que se desarrollaron a lo largo del pasado siglo y que fueron inspiradores de artistas posteriores.el arlequin

Aunque es mundialmente famoso como pintor, no sólo trabajó esta expresión artística, también abordó otras disciplinas como el dibujo, el grabado, la ilustración de libros, la escultura, la cerámica y el diseño de escenografía y vestuario para montajes teatrales.

Hijo de María Picasso y José Ruiz, su padre era profesor de dibujo en la Escuela de San Telmo de Málaga y allí empezó a estudiar dibujo Picasso, si bien con tan sólo ocho años ya era capaz de hacerlo de forma sorprendente.

Pasó su primera infancia en la Plaza de la Merced de Málaga -por la que paso a menudo, siempre que estoy por allí- en la casa donde nació y cuando tenía diez años toda la familia se trasladó a A Coruña, donde su padre había conseguido una plaza de profesor de instituto. Pero fue en 1895 cuando toda la familia se trasladó a Barcelona  donde el padre ejercería la cátedra de dibujo en la Escuela de Artes y Oficios de Barcelona. Y fue allí -en Barcelona- donde Picasso se formó ya como un prometedor pintor, pero fue en Francia -concretamente en París- donde se convirtió en el genio que fue.

Tuvo una extensa, fructífera y asombrosa  vida artística, que le otorgó el título de genio de la pintura. Sin embargo su vida familiar no fue tan afortunada como la artística, porque siempre antepuso su pasión por la pintura por encima de todo.

octubre, 2013 © chelopuente

el guernica


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Fan de la belleza


giocondaVolver a París y no visitar el Museo del Louvre sería un pecado casi mortal. Del mismo modo, entrar en el Louvre e ir a hacerle una visita a la Gioconda, es casi una obligación. Y no seré yo quien le reste méritos al archifamoso cuadro de Leonardo da Vinci, ni le reste calidad pictórica, ni nada por el estilo, pero sí que es cierto que me sigue sorprendiendo que, para poder saludar a la Gioconda, tengas que traspasar hasta cuatro filas de personas que se afanan por hacerse fotos con ella sin apenas dedicarle una mirada.

Pero de todo ésto, lo que más me sorprende es que, como decía anteriormente, un gran número de personas se agolpen alrededor de la Gioconda y apenas una o dos personas se detengan en el magnífico cuadro que tiene en frente, a pesar de su descomunal tamaño. Me refiero a Las bodas de Caná, de Paolo Veronese, llamado el Veronés.

OLYMPUS DIGITAL CAMERAEsta sensacional obra le fue encargada al Veronés para el refectorio del convento benedictino de San Giorgio, donde se colgó en 1563 y en cuya inmensa pared permaneció durante más de 200 años, hasta que Napoleón la sustrajo en 1797 durante la Campaña de Italia y se la llevó al Louvre donde sigue en la actualidad.

Fue una obra muy polémica en su momento, dado que se representa un pasaje del Evangelio -el primer milagro de Cristo- como si se tratara de una de las fastuosas fiestas venecianas de la época. Sobre un fondo de arquitectura renacentista a modo de telón teatral, las maravillosas figuras alrededor de la mesa destacan con sus lujosos ropajes, de aquellos colores que sólo el Renacimiento ha sabido plasmar en un lienzo… los verdes tornasolados, los rojos carmesí, los azules ultramar, reflejan obviamente una opulencia contraria a lo que debería haber representado un pasaje del Evangelio; al igual que destacan sus arriesgados escorzos.

En fin, que con esta reflexión quería pensar en que -a veces- nos dejamos deslumbrar por lo famoso y eso nos resta la oportunidad de disfrutar de la belleza menos famosa.

septiembre, 2013 © chelopuente


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Las lágrimas de San Lorenzo


las lagrimas de san lorenzo

 

Las lágrimas de San Lorenzo

Julio Llamazares

Edit. Alfaguara

Leer a Julio Llamazares siempre me ha producido un inmenso placer, desde que le leí por primera vez cuando me sumergí de lleno en La lluvia amarilla. Después vinieron Luna de lobos, El cielo de Madrid y Tanta pasión para nada. Y ahora he vuelto a disfrutar, con Las lágrimas de San Lorenzo, de su forma tan poética de escribir.

Un profesor de universidad de Lengua y Literatura española, que ha pasado toda su vida rodando por Europa y sin echar raíces en ninguna de las ciudades en las que ha vivido, regresa a Ibiza, el lugar donde pasó sus mejores años de juventud, para pasar unas vacaciones con Pedro -su hijo de 12 años, al que apenas ve porque vive en París con su madre- y al mismo tiempo asistir a la lluvia de estrellas de la mágica noche de San Lorenzo.

Juntos -sentados en una manta- contemplan el cielo lleno de estrellas, de esas estrellas que representan a cada una de las personas queridas que ya no están entre ellos. Así pues, el cielo estrellado, el recuerdo del  olor a campo y el mar agitando las olas, se confabulan para que acudan a su memoria los recuerdos de los días felices del pasado, de la amistad de Otto y Daniel, de los amores de Nadia, Tanja, Carolina, Marie… sobre todo Marie, su gran amor y madre de su hijo.

Los recuerdos, la imaginación y sobre todo la melancolía, dan como resultado una historia emocionante de recuerdos, de padres, de hijos, de amantes, de amigos, de encuentros, de despedidas, de huidas… Una simbólica historia sobre los paraísos y los infiernos que fueron parte de su vida.

Una magnífica y emocionante novela que nos habla fundamentalmente de la fugacidad del tiempo, de la memoria, para lo que recurre a versos de Catulo, esos versos que han acompañado al protagonista en su peregrinar por tantas universidades europeas, donde cada año él era más mayor pero sus alumnos tenían siempre la misma edad de la juventud. Una preciosa metáfora de las lágrimas de la humanidad simbolizadas en Las lágrimas de San Lorenzo.

¡¡Feliz lectura, amigos!!

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