DÉJAME QUE LLORE
Mari Carmen Navarro Ruiz
Edit. Leibros, 2018
El poder que da la posesión de la tierra establece la jerarquía entre los hombres, terratenientes y labriegos. Un dominio tácito que establece las fronteras entre la pobreza y el dinero. La dignidad se pone en juego cuando la miseria y el hambre se convierten en las bazas de una partida sin reglas escritas. Entonces, hacer cualquier cosa por sobrevivir deja de ser una opción para convertirse en un yugo insoportable. Y, en frente, quienes defienden a cualquier precio sus honorables privilegios.
España, dividida, defiende y ultraja, a un mismo tiempo, los cimientos de su República.
La vida de Fernando, que ama la libertad por encima de todas las cosas mundanas, se convierte en el hilo conductor de un conflicto que nos conducirá hasta el paredón de los horrores. Allí, bajo el estigma de la sangre, se van a dirimir los ultrajes, las venganzas y las iras de un hermano contra el otro.

Mari Carmen Navarro Ruiz
Lo cierto es que leyendo la reseña del libro, que he reflejado anteriormente, se consigue ya una idea clara del contenido de esta historia que no por conocida deja de ser tan desgarradora. Cuando digo conocida me refiero a ese servilismo patético y obligado que las personas más pobres tenían hacia lo ricos y a la prepotencia asquerosamente violenta que mantenían los poderosos con aquellos que no trabajaban para ellos sino que los servían de forma humillante, hasta robarles no solo el sustento sino también la dignidad.
Los tiempos convulsos que fueron el preludio del Golpe de Estado de 1936, el estallido de la Guerra Civil y la posterior posguerra fueron años de extrema necesidad. Familias enteras morían de hambre mientras la propiedad de la tierra se concentraba en unas pocas manos. Así lo relata Mari Carmen Navarro Ruiz en esta novela que te va encogiendo el corazón y enfureciendo al mismo tiempo.
Déjame que llore es de lectura amena y debería ser obligatorio leerla, para unos porque no se debe olvidar lo ocurrido y para otros para conocer lo que ocurrió, además de que nos debe mantener alertas para que no permitamos que puedan suceder estas situaciones.
Es lo primero que leo de esta autora pero no será lo último porque le doy la bienvenida a mi biblioteca particular y, ya sabéis lo que quiero decir con ésto, que recomiendo su lectura porque no os decepcionará.
¡Felices lecturas, amigas y amigos!