Como ya os comentaba en mi entrada Historia de dos pintoras I, desde el 22 de octubre de 2019 y hasta el 2 de febrero de 2020 se muestra en el Museo del Prado una exposición excepcional, como un elemento más de todos los eventos organizados con motivo de la celebración del Bicentenario del Museo.
Leticia Ruiz, Jefa del Departamento de Pintura Española hasta 1500 es la comisaria de la exposición Historia de dos pintoras: Sofonisba Anguissola y Lavinia Fontana y nos presenta un conjunto de 65 obras que se reúne por primera vez en España (y casi me aventuraría a decir que en el mundo). Son pinturas procedentes de más de veinte colecciones europeas y americanas, que recogen los trabajos excepcionales de las dos mujeres pintoras más importantes de la historia del arte del siglo XVI. Estas dos pintoras son: Sofonisba Anguissola y Lavinia Fontana.
En la pasada entrada os hablé de las obras de Sofonisba Anguissola, bien pues hoy lo haré de Lavinia Fontana.
Lavinia Fontana (Bolonia, 1552 – Roma, 1614)
Hija del pintor Prospero Fontana (de la escuela de Bolonia) aprendió de él el oficio de la pintura. Su estilo estuvo siempre cercano al Manierismo tardío, que era el que practicaba su padre, y que la llevó a ser la pintora italiana más importante del primer Barroco. Ya desde muy joven comenzó a realizar pequeñas obras, principalmente retratos, que en un inicio eran en miniatura.
Se casó con Gian Paolo Zappi, un hombre rico y discípulo de su padre. Siguió pintando durante su matrimonio para ayudar a la familia mientras su esposo se encargaba de la casa y asistía a su mujer como ayudante, algo inusual en la época. Posteriormente la familia se trasladó a Roma en 1603 por invitación del papa Clemente VII, donde obtuvo el mecenazgo de los Buoncampagni.
Poco a poco su estilo se fue haciendo más clasicista y recibió la influencia de artistas como Correggio. Todo esto hizo que fuera admitida en la Academia de Roma
Como decía anteriormente, su pintura destaca en la realización de retratos y aquí se incluyen también sus propios retratos, como este Autorretrato de Lavinia Fontana escribiendo, en el que se representó escribiendo, y que se conserva en la Galería de los Uffizzi. En él se ha representado realizando una tarea artística diferente al propio hecho de la pintura.
Uno de loa hechos más sorprendentes es que Lavinia Fontana realizara desnudos, tanto de hombres como de mujeres, en los que ofrece un aspecto casi erótico, como ocurre en las de corte mitológico, como esta Minerva vistiéndose, en la que es posible que representara su propio cuerpo.
Uno de los retratos más impresionantes de esta pintora es el Retrato de Constanza Alidosi, procedente del National Museum of Women in the Arts de Washington. En él se puede apreciar la perfección en la realización de los ropajes, el preciosismo de los encajes y la psicología del personaje en el rostro.
Quedan pocos días ya para poder ver esta exposición que es tan maravillosa como extraordinaria, dado que será difícil que puedan unirse estas obras en otra ocasión, por eso, si aún no la habéis visto, id, no os la perdáis.
2020©chelopuente