Cuando suenen las campanadas que anuncian el final de este año y el inicio del próximo, pensaré en cada una de las personas que han pasado por mi vida y por las que en algún momento habéis pasado por aquí, pero sobre todo pensaré en ti… sí, sí, en ti que vienes cada día a visitarnos y a regalarnos tu comentario o tu me gusta, porque tú eres la luz que ilumina este rincón donde todos sois bien recibidos.
Por eso os doy las GRACIAS y os deseo TODO LO MEJOR.
Hoy es un miércoles de poesía un poco especial. Es el primero después de las vacaciones y además quiero utilizarlo para dar las gracias.
Como cada verano, he pasado unos días en mi pueblo aunque, en honor a la verdad, no es mi pueblo realmente. Es el pueblo de mis padres y en el que he pasado muchos veranos de mi infancia. Se llama Retuerta y es pequeño, de pocos habitantes (deben ser unos 60 ó 70 las personas que viven allí todo el año), bañado por el río Arlanza, con bosques, monte y un sinfín de lugares maravillosos para disfrutar. En él me inspiré para crear Villaduero, el pueblo inventado al que va de maestra Luisa, uno de los personajes de mi novela, La bolsa de lana azul.
Durante el tiempo que he estado allí he recibido felicitaciones y enhorabuenas por la novela y yo cada vez estaba más sorprendida de que hubiera llegado la noticia a un lugar tan pequeño, donde más de diez personas la habían leído y me comentaron lo mucho que les había gustado. Y yo, tímida y sonrojada al oir sus alabanzas, no podía estar más contenta, porque son personas a las que aprecio mucho.
Por todo esto, hoy sólo quiero dar las gracias a estas personas, a las que conozco hace muchos años y con algunas he compartido juegos y travesuras en la infancia. También quiero dar las gracias a todas las personas que me habéis leído y en especial, a las que además me habéis dado vuestra opinión. A todos ¡Gracias!
Y para este agradecimiento, no se me ocurren mejores versos que los de la gran
Mercedes Sosa.
Gracias a la vida que me ha dado tanto Me ha dado el sonido y el abecedario Con él las palabras que pienso y declaro Madre, amigo, hermano y luz alumbrando La ruta del alma del que estoy amando.