LA SOSPECHA DE SOFÍA
Paloma Sánchez-Garnica
Edit. Planeta, 2019
La anodina vida de Sofía y Daniel cambia radicalmente cuando él recibe una carta anónima en la que se le dice que Sagrario, a la que venera, no es su verdadera madre y que si quiere conocer la verdad de su origen debe ir a París esa misma noche. Intrigado, pregunta a su padre por esta cuestión y él le recomienda que lo deje pasar, que no remueva el pasado. Sin embargo, hay preguntas que necesitan una respuesta y esta búsqueda desencadenará una sucesión de terribles acontecimientos y encuentros inesperados de infortunado desenlace que trastocará su vida y la de su mujer, Sofía, para siempre.
LA SOSPECHA DE SOFÍA es la primera novela que leo de Paloma Sánchez-Garnica y me ha parecido que plasma muy bien con esta historia la vida durante los tiempos de la posguerra española, al igual que el mundo que se movía alrededor de los años más oscuros de la RDA. Y además de crear un ambiente muy bien trabado, en el que se mueven con soltura unos personajes que van dando vida a pequeños detalles, lo que hace que se conviertan en unos personajes tan potentes que difícilmente se te van de la cabeza, aun después de haber terminado su lectura.

Paloma Sánchez-Garnica. Madrid, 1962
El Madrid cercano a los años 70, el París de mayo del 68, la RDA, la Stasi, el muro de Berlín y la KGB con los servicios de contraespionaje en la España franquista, todo ello unido a tres personajes principales, son la clave sobre la que gravita esta novela de suspense. A esto le unimos la historia de dos familias totalmente diferentes que viven en dos lugares lejanos entre sí: el Madrid de los últimos años del franquismo casposo y el Berlín de los años de aquel muro que fue la deshonra de los alemanes.
La trama de esta novela me ha resultado muy original y me ha parecido muy bien construida y de una gran fuerza narrativa. Mientras la iba leyendo, con gusto y con urgencia, mi mente trataba de imaginar un final para aquella historia, pero no conseguía ver cuál podría ser el mejor desenlace. Sin embargo, a medida que me acercaba al final, me iba cuestionando algunas cosas trascendentes que salen a lo largo de la historia. El final no me defraudó, porque la autora consigue que sea muy bueno, a la altura de toda la historia.
Como podéis apreciar, es una novela que me ha proporcionado unos ratos buenísimos de lectura y que os recomiendo mucho que leáis.