Desde la parada del autobús veo la Universidad aún vacía. Solo de vez en cuando algún alumno cruza por el campus, quizá ultimando los trámites finales de su matrícula, o escogiendo alguna asignatura de elección dudosa.
Hoy llueve y el cielo está muy gris, es un día preludio del otoño. A mí me asalta la nostalgia y el recuerdo de aquellos años, ya lejanos, cuando esperaba expectante el inicio de un nuevo curso universitario.
4 de octubre de 2019 en 11:12
Me atrevería a decir que son los mejores años, en los que todo está por venir.
Un beso guapa!
7 de octubre de 2019 en 16:09
Así es, Bárbara, y cuando te quieres dar cuenta pasaron hace mucho tiempo, demasiado…
Un beso.