
Portada del libro
AZULES SON LAS HORAS
Inés Martín Rodrigo
Edit. Espasa, 2016
En plena Primera Guerra Mundial, justo antes de la toma de Varsovia, una mujer se jugaba la vida en el frente. Se trataba de la española Sofía Casanova, la primera corresponsal de guerra de la historia, que escribía sus reportajes para ABC, visitando las trincheras y denunciando la brutalidad de la contienda. Lejos de la tranquilidad que alguna vez Sofía había imaginado para su vida, se encontraba en Polonia cuando estalló la guerra.
La extraordinaria vida de esta mujer empezó cuando, siendo niña, su padre abandonó a su familia y se vieron obligados a mudarse desde su Galicia natal a Madrid. Allí, pronto despuntó en los estudios y frecuentó los círculos más selectos. El día que la conoció el diplomático y filósofo polaco Wincenty Lutoslawski supo que tenía que ser
su mujer. Se casaron y se marcharon a Polonia, el primero de sus destinos.

Inés Martín Rodrigo – Madrid, 1983
Pero al cabo de los años, Lutoslawski repudió a Sofía y esta tuvo que buscarse la vida para seguir alimentando a sus hijas.
Me ha sorprendido muy gratamente encontrarme con esta novela, la primera de la joven periodista Inés Martín Rodrigo, que se mueve con gran sutileza entre la realidad de la vida de Sofía Casanova y la ficción de la que ha dotado la autora a sus personajes.
Como os decía, me encontré con Azules son las horas por casualidad y me interesó muchísimo conocer la vida de Sofía Casanova, de la que apenas sabía nada. Con su lectura he valorado aún más a esta magnífica mujer que fue reportera de guerra, poeta, enfermera, sufragista, intelectual, viajera, dramaturga y madre en una vida intensa rodeada de mujeres fuertes como ella.
Si os apetece ahondar algo más en el conocimiento de Sofía Casanova, no dudéis en leer esta novela y os encontraréis con un relato fresco y entrañable pero con una gran fuerza narrativa, contado por la propia Sofía cuando, a sus noventa y seis años, está a punto de morir rodeada de su hija y sus nietos.
¡Felices lecturas, amigos!
16 de septiembre de 2016 en 11:04
Gracias por tu interesante reseña y enlace.
Buen día, Chelo. Y un fuerte abrazo.
16 de septiembre de 2016 en 19:07
Gracias a ti, Isabel por pasearte por aquí.
Besos lectores.