Hoy me pongo el lazo rosa, y lo hago por ti que estás en plena lucha, por ti que ganaste la batalla y por ti que te quedaste en el camino, porque con este gesto simbólico, os recuerdo a todos y cada uno de vosotros.
Me lo pongo porque no voté al partido maligno que se dedica a recortar en sanidad y en investigación. Me lo pongo porque me lanzo a la calle a protestar por semejantes acciones, que van en contra del bienestar más básico, que es la salud. Me lo pongo porque soy donante… y por tantas cosas más.
No creas que me siento más solidaria que tú que no te lo pones, en absoluto… hoy me pongo el lazo rosa sólo porque quiero.
19 octubre, 2013 © chelopuente
22 de octubre de 2013 en 19:51
Bonito y valiente texto, Chelo. En momentos oscuros en los que la vida de las mujeres importa menos que los intereses de la deuda, aquellos en que no hay dinero para realizar las mamografías a tiempo, en los que los padres tienen que asumir el gasto oncológico de sus hijos enfermos, digo, en estos momentos tendríamos que ponernos el lazo todos los días y las camisetas verdes y … cualquier signo que les haga reflexionar si es que tienen, los responsables, aún vergüenza.
Un abrazo solidario.
22 de octubre de 2013 en 20:34
Desgraciadamente, Bárbara, vergüenza tienen muy poca. Y si, parece importar más lo económico que la salud de los ciudadanos.
Un abrazo enorme, querida amiga.