El día 20 de noviembre de 1923 nacía cerca de Johannesburgo la escritora sudafricana NADINE GORDIMER – Premio Nobel de Literatura en 1991.
Hija de padres judíos emigrantes, comenzó a escribir con nueve años, y con quince publicó su primer relato en la revista Forum. Durante su inicio como escritora se decidió por las historias cortas y comenzó a interesarle el tema social en Sudáfrica y el comportamiento humano en la discriminación racial, que le acompañará en toda su trayectoria literaria.
Hasta 1953 no publicaría su primera novela, a la que se sucedieron otras, aunque nunca dejó de escribir relatos cortos.
Obras tan importantes como Saqueo un libro de diez relatos sorprendentes que revelan experiencias impactantes; o Alguien que me acompañe que narra la historia de una mujer en los años posteriores a la abolición del apartheid y su condición de activista, forman parte de sus escritos.
Y, como siempre, el mejor regalo son sus propias palabras…
«No encontraba una postura en la que mi mente se desprendiera de mi cuerpo, liberándome para volverme a dormir. Así que empecé a contarme un cuento; uno de esos cuentos propios de la hora de acostarse…»
Fragmento de Érase una vez
Nadine Gordimer – Johannesburgo, 1923
Chelo Puente – noviembre, 2012
20 de noviembre de 2012 en 08:00
qué deliciosas esas, sus propias palabras. «no encontraba una postura….» uff. gracias chelo.
20 de noviembre de 2012 en 13:49
… así que empecé a contarme un cuento…
Gracias a ti, Marisa.
20 de noviembre de 2012 en 08:49
Da gusto abrir tu blog por las mañanas, siempre hay alguna cosa buena que se aleja de tanta porquería concentrada por ahí. Me gusta, lo sabes… sé que lo sabes…
Un beso de los de martes sin cambiar una coma del refrán…
20 de noviembre de 2012 en 13:50
Lo sé, y me gusta que te guste.
Un beso de mediodía soleado.
20 de noviembre de 2012 en 14:09
Gualaaaaaaaaaaaaaaaaa………………!!!!!!!!!!!!!
20 de noviembre de 2012 en 10:54
Que bonita manera de dormirse con un cuento. Mejora con creces a los somníferos, natural, creativo y gratis… Un beso, Chelo
20 de noviembre de 2012 en 13:52
Precisamente hoy, que es el Día Internacional del Niño, no debería haber ningún niño que se durmiera sin escuchar un cuento, ni ningún adulto.
Besos, femeniname.