
Un poema de Juan Manuel González Zapatero, de su poemario Sea de ello lo que fuere, para este miércoles de poesía…
AQUÍ Y AHORA
Estos son, no son otros
los días y los pasos despistados.
Cuando me paro y nada se me ocurre
digo: «Estos son y no otros».
No otros días, por más que los recuerde
ahora transformados,
como si hubieran sido
lo que estos son, o yo no veo.
Porque puede que sean
días tranquilos, dulces como un sueño,
y que les falte solo
haber pasado, estar en el recuerdo,
para sentir que fueron
los días más felices de mi vida.
Un poema muy significativo, cuando se piensa en esos días que, de haber existido, podrían haber sido felices.
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Aprender
que con certeza, nada tengo que no me des,
a conseguir que el corazón se conmueva siempre por el frágil gesto
de la belleza.
Aprender que sólo soy si tú existes, y es esta la medida que quiero y me define.
Aprender para saberse desprender, he aquí el viejo secreto. Aprender...
(Fragmento de "Aprendre", poema de Lluis Llach)
31 de octubre de 2012 en 07:49
Precioso poema,
Besos
ana
31 de octubre de 2012 en 15:03
¿Verdad que sí, Ana?.
Besos.
31 de octubre de 2012 en 08:00
Creo que mis pasos despistados también se convertirán en los días más felices de mi vida…
Un petò de dimecres…
31 de octubre de 2012 en 15:04
Hay veces en que se anda despistado cuando se encuentra un tesoro, Josep.
Un beso con acento.
31 de octubre de 2012 en 23:23
Bello poema y preciosa la Macarelleta de mi querida Menorca donde me crié.
1 de noviembre de 2012 en 15:08
Precioso lugar y precioso poema, es cierto.
1 de noviembre de 2012 en 15:02
Y, digo yo, para que torturarse pensando que pudieron ser los dias mas felices si en realidad no lo fueron porque no existieron? Abajo «lo que pudo ser y no fue» y arriba esos corazones 🙂
Un abrazo
1 de noviembre de 2012 en 15:09
Es posible que parezca una forma de torturarse, pero todos recordamos aquello que pudo haber sido y no fue.