Tanto ir y venir al contenedor ha hecho que me olvide de algo muy importante. Hoy es el 77 cumpleaños de Kenzaburo Oe, Premio Nobel de Literatura en 1994 y autor de una obra sumamente especial, y para mí bastante inquietante.
Desde que en 1963 naciera su hijo Hikari, toda su obra se va a ver influenciada por la experiencia de convivir con un hijo aquejado de una enfermedad mental (hidrocefalia) que ha derivado en un autismo.
Su obra «Una cuestión personal» está escrita después del nacimiento de Hikari y tiene un tono autobiográfico. A mí me dejó «tocada» que dirían los jóvenes, pero os recomiendo su lectura que no es sencilla, que es una historia dura pero posee algo entre las líneas que la hace gran literatura.
Y como siempre, el mejor homenaje son sus propias palabras…
«Todos estamos aparentemente atrapados en un mundo mental en el que las visiones se diluyen con la ensoñacion y el deseo»
Kenzaburo Oe – Ose, aldea de Shikoku, 1935
La frase me viene estupendamente estos días ¿acaso creeis que las escojo adrede? pues teneis razón, ya os habeis dado cuenta, jejeje.
¡¡Felicidades, Kenzaburo Oe!!
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